Mis sueños: lo más profundo de mi inconsciente. Me pregunto: ¿Cómo llegaste a él? Supongo que de la misma manera que llegaste a mi mundo: por azar y fortuna. Si tan sólo hubiera alguna manera de hacer realidad mis sueños. Ojalá me fuera tan fácil encontrarte a mi lado aquí y ahora, como lo es encontrarte en mis fantasías.
¿Te imaginas? Estar juntos en este momento gracias al poder mágico de los deseos. ¿No sería increíble? Claro que lo sería.
Llevaba días tratando de que con tan sólo cerrar mis ojos, al abrirlos te encontraras frente a mí. Pero no funcionó.
Seguí intentando, tenía que haber alguna forma de hacerlo. Esta vez cerré mis ojos y los mantuve así. !Funcionó! De repente estabas ahí. Estabas conmigo.
Lo maravilloso es que desde ese día no has desaparecido. Noche tras noche, después de repetir el hechizo mágicamente te apareces en mí, dejándome disfrutar de tí siempre que lo desee y recuerde las palabras mágicas.
Diana